Psicofango

Después de ser travesera que suena escondida en la pantalla hicieron magia. ¡Que se mueva! Grité a la red desde mi ventana. La cámara se movió y la cabeza que toca, tocaba, apareció hecha gracia y de sonar sin ser pasó a ser flautista hermosa. Vi que además de la música llena la presencia de la persona, no llenaba, llenó. Las notas ya las oía pero después fue mejor.

Te lo explico. Es como una novela de música y de psicología, con mucha poesía, danzando dentro de mi cabeza. Importan los ritmos argentinos, la lectura, poesía sin lectura sería locura, y al final de la segunda película asoma la estrella. Ya pienso en dos películas y hablaba de novela, no hay quien lo entienda.

Bastará con que leas si te gusta. Los sonidos quedan música de mis oídos.