Pasión en el leer
Pasión en la lectura. En las manos un texto que me gusta y disfruto mientras leo.
No necesito leerlo como tú lo entiendes, no necesito ni entenderlo como no necesito saber inglés para disfrutar de Bach en alemán. Espero que no me entiendas mal pero disfruto leyendo tan solo con leer. Lo que luego entiendo, si entiendo, puede ser más o menos placentero, y si decido gastar un poquito de tiempo en entender entonces es que es algo parecido a un paseo por los senderos del cielo y entra con cariño en mi cerebro bañándolo de placer.
Poesía. Disculpa pero no tiene nada que ver, puede ser poema basura y savia divina la prosa leída.
Muchas veces, sin entender lo grande es sentir. Antes de leer suelo pedir que los segundos corran dejándome vivir horas y horas de continuo gozo como si fuera un niño bobo.
Tampoco me importa recordar, si no lo hago tendré la oportunidad de volver a disfrutar, pero eso sí que es ciencia exclusiva de la poesía. La prosa solo me provoca una vez porque después se deja reconocer, la poesía evoca en mí cada día si de verdad entra en mi vida. No sabes el porqué pero pienso en Argentina. Yo sí lo sé y Borges, aunque fue, aquí no tiene nada que ver.