Besos
Los mismos ingredientes el beso siempre diferente.
Ardieron ayer, hoy arden, mañana también arderé cuando los labios bailen.
Casi iguales los dos besos que arden encarnados en el Hades. Dios, tú, yo, el aire, en tu pecho dos humanidades.
Bésame otra vez. ¡Que nunca se acabe!
Letras parecidas en el viento cambian todos los días, hace meses, ayer, hoy y el mes que viene, distintas palabras aunque san parecidas contarán las mismas ideas diferentes cada vez que se escriban, diferentes cada vez que se lean.
Flor que reina, que no flor cualquiera, la flor de tu presencia.
Flor de esencia.
Fuego en tu pecho, rojo que arde en el sexo colmando el cerebro.
Savia que bulle dentro en las venas.
Tú quemas infierno dulce lengua salvaje.
Tu soplo. Tu sexo solo. Tu cuerpo todo.
Volcán de labios rojos. ¡Tanto placer! ¡Aire! ¡Aire! ¡Aire!
Todo fuego. Tú y nadie más que carne.
Arde tu pecho, arte tu sexo, dos cerebros que arden,
hierve tu sangre dentro de mi sangre quemándome.
Quemas con labios de infierno y lengua salvaje.
Aliento. Sexo. Tu cuerpo.
Dos cuerpos, dos cuerpos que laten placer de titanes.
Todo fuego. Tú vales inmortalidades.